Para todos aquellos usuarios que piensan que la división de semiconductores de Samsung solo se dedica a fabricar componentes para dispositivos móviles, hoy nos levantamos con una noticia que demuestra, una vez más, que la capacidad de Samsung va mucho más allá de los dispositivos móviles.
La rama de negocios de semiconductores de Samsung ha firmado un acuerdo con IBM para fabricar el último procesador que este fabricante ha diseñado, un procesador destinado centros de datos bautizado como POWER10 y que está basado en tecnología de proceso de 7 nn.
El nuevo POWER10 es el sucesor de POWER9 y es tres veces más eficiente en consumo energético, uno de los principales problemas de los centros de datos. Además, cuenta con nuevas capacidades de seguridad habilitadas vía hardware como la encriptación de memoria e introduce una tecnología bautizada como Memory Inception que mejorar el rendimiento en la nube que reduce los tiempos de carga cuando se hace un uso intensivo de memoria.
En cuanto a rendimiento, la nueva arquitectura de 7 nn del POWER10 integra una Inteligencia Artificial que permite realizar cálculos rápidos de FP32, INT8 y BFlota16. La presentación de este nuevo procesador no habrá sentado nada bien en Intel quien hace unas semanas anunció un nuevo retraso en la fabricación de sus nuevos procesadores de 7 nn.
Este acuerdo le permite a Samsung plantar cara al todopoderoso TSMC, la empresa taiwanesa líder en la fabricación de procesadores, empresa que fabrica los procesadores de Apple, Intel, Qualcomm y hasta hace unas semanas, también fabricada los Kirin de Huawei. Samsung fabricará en exclusiva este nuevo procesador, sin compartir parte de la fabricación con TSMC.
