Hay vida mucho más allá de Chrome, el navegador más utilizado en todo el mundo, debido en gran parte a que viene reinstalado en la mayoría de smartphones y a la continua insistencia del buscador para que lo instalemos, cuando utilizamos cualquier otro desde nuestro ordenador.
Sin embargo, y a pesar de que Chrome nos ofrece muchas funciones, la privacidad del usuario es algo que a más de uno debería comenzar a preocuparnos. Firefox de la Fundación Mozilla es una excelente opción a tener en cuenta. Vivaldi es otro, sobre todo ahora que ya está disponible en la Play Store, aunque de momento solo en fase beta.
Vivaldi, al igual que todos los navegadores del mercado, está basado en Chromium. Actualmente tiene versiones tanto para Windows como para Mac y Linux y nos ofrece un sistema de sincronización para poder disponer del mismo contenido en todos los dispositivos asociados a la misma cuenta.
Al encontrase en fase beta, todavía le faltan algunas funciones que podemos echar de menos si habitualmente utilizamos la versión para escritorio, donde la posibilidad de apilar pestañas todavía no está disponible, una función que cuanto te acostumbras a ella, ya no puedes vivir sin la versatilidad que ofrece.
Vivaldi nos permite seleccionar cual es el navegador por defecto que queremos utilizar, ya sea Bing, Yahoo, Google, Wikipedia, DuckDuckGo… además de permitirnos una gestión del historial de búsquedas que otros navegadores ya quisieran.
Para los que nunca hayan oído hablar de Vivaldi, debéis saber que este navegador nació de la mano del antiguo CEO de Ópera, una vez que pasó a formar parte de un conglomerado de empresas chinas.
Vivaldi nació con la idea de poder volver a hacer un navegador como fue Ópera en sus inicios, alejado de las grandes corporaciones y con un gran número de funciones, funciones que en ocasiones nos pueden llegar a ser de muchísima utilidad y salvarnos de un apuro.