Hace ya unos meses que Qualcomm nos mostró su nueva gama de procesadores Snapdragon 810. Sabemos que será una bestia con una potencia increíble, pero los chicos de Qualcomm tenían un secreto muy bien guardado: la frecuencia de reloj a la que trabajan los núcleos de esta nuevo SoC.
El procesador Qualcomm Snapdragon 810 cuenta con ocho núcleos, compuesto por cuatro núcleos Cortex A57 y otros cuatro núcleos A53 que funcionan a diferentes frecuencias de reloj, para de esta forma balancear la potencia en función del proceso que se requiera. Y ahora sabemos cual será la potencia del procesador que integrarán la mayoría de buques insignia que las compañías nos presentarán a lo largo del próximo año 2015.
El Qualcomm Snapdragon 810 será un procesador muy potente
Los cuatro núcleos Cortex A57 del SoC Qualcomm Snapdragon 810 contará con una velocidad de reloj de 1.96 GHz, muy lejos de los 2,65 GHz que alcanzan los que integra el Snapdragon 805. Por otro lado los cuatro núcleos Cortex A53 alcanzarán una velocidad de reloj de 1.56 GHz de potencia.
Evidentemente, y aunque veamos que el procesador Qualcomm Snapdragon 805 cuenta con cuatro núcleos con mayor velocidad de reloj, la frecuencia que ofrece el Snapdragon 810 promete un rendimiento mucho más elevado. Por no hablar del soporte 64 bits, algo que no está disponible en sus predecesores y que permitirá aprovechar al máximo las ventajas que ofrece este tipo de arquitectura, además de poder integrar más memoria RAM.
Por otro lado tenemos una mejora notable de la eficiencia energética, al utilizar núcleos más potentes con núcleos más eficientes. Sumando al hecho de que el Qualcomm Snapdragon 810 utiliza un proceso litográfico de 20 nm, mientras que el Snapdragon 805 utiliza tecnología de 28nm para su construcción, tenemos una nueva gama de procesadores mucho mejor optimizada.
¿Significará esto que nuestros smartphones durarán más tiempo encendidos gracias a estos nuevos procesadores?. Pues la verdad es que dudo mucho que notemos una mejora notable en el rendimiento. El principal motivo por el que nuestros dispositivos móviles tienen una autonomía tan baja es la pantalla que utilizan, y que consume la mayoría de recursos. Aunque ahora cuando disfrutemos de un juego, el procesador no se comerá la batería en poco tiempo.