De Kik hacía ya un tiempo que no hablábamos. Una app de mensajería que se ha visto relegada por esa WhatsApp, Telegram y LINE, aunque sigue dando guerra cuando en ciertos países sigue teniendo su importancia. Si volvemos a hablar de ella es porque su equipo de desarrollo ha sacado alguna nueva actualización, por lo que estamos ante otra de las alternativas del mercado que sin llamar mucho la atención sigue pujando tan fuerte como puede.
Esta app tiene su gran público en Estados Unidos y Canadá, sobre todo entre los jóvenes y adolescentes, y ha sido actualizada en el día de hoy para añadir el chat de vídeo a su servicio. En vez de hacerlo de una manera más normal, como ha sido la videollamada en WhatsApp, Kik ha introducido una opción de vídeo menos intrusiva a sus más de 300 millones de usuarios registrados, con el soporte de lo que es los grupos de hasta 6 personas.
Dándole una vuelta de tuerca a la videollamada
Una de las peculiaridades de las llamadas de vídeo de Kik es que, en vez de relegar en el formato en que se muestra al parlante en la pantalla principal, lo que esencialmente fuerza a los participantes a dejar lo que estén haciendo para tomar parte de la discusión, esta app ha creado una capa adicional que se posiciona sobre el chat de conversación y es accesible a todos; incluso cuando los participantes están fuera de la conversación o son incapaces de activar su vídeo.
Tal como lo indica el CEO de Kiki, Ted Livingstone, el chat se convierte en un espacio compartido en el que la videollamada tiene también su porción. Desde aquí, los streams de vídeo son más pequeños y flotan sobre el texto de manera que no dificultan para nada la visión. Lo que es interesante, es que también la interfaz pone su propio streaming de vídeo al lateral, para que así nadie esté consumiendo su tiempo observando su propia apariencia. Este es un error que solemos cometer la gran mayoría y que ahora se intenta solucionar desde Kik.
Esto lo que consigue es que la conversación a través del texto fluya durante el vídeo, co la opción de poder compartir contenido visual como pueden ser stickers, imágenes o vídeos durante la conexión de la videollamada, que se activa al pulsar sobre el icono en la esquina superior derecha.
Por lo que finalmente nos quedamos con un streaming de vídeo que aparece flotando mientras todo ese contenido multimedia más el texto del chat fluye ante nosotros sin verse interrumpido. Una forma más entretenida de disfrutar un rato ameno con amigos y por lo que parece que Kik ha sabido dar con la tecla adecuada para llevarnos ante otra experiencia.
¡A copiar!
Si esa experiencia suma enteros, no tardará el resto de la competencia de añadirla a sus apps para que las videollamadas tengan otros matices, ya que es en esta funcionalidad donde meramente se copian sin traer alguna novedad que suscite otras sensaciones. Si miramos a Skype y WhatsApp en las videollamadas son casi idénticas y se distancian bastante de lo que oferta ahora mismo Kik con esta nueva actualización.
Kik mantiene que el chat de vídeo había sido una de las principales características pedida por su base de usuarios. Kik ha tenido también una relación cercana con los chat bots este mismo año, pero es ahora cuando quieren añadir una funcionalidad muy importante para el entretenimiento y que viene en la mejor época posible, la Navidad.
Para el año que viene se puede esperar la extensión del multimedia y la introducción de características como los pagos. Una app que toma otro camino para diferenciarse de la competencia, más centrada en copiar que en intentar transformar esas experiencias a las que solemos estar acostumbrados con una videollamada en grupo que se le ha dado una vuelta de tuerca esta vez en Kik.
