En los últimos años, la televisión de Android ha pasado de convertirse en una plataforma minoritaria utilizada principalmente en set-top boxes conectados a la televisión de uso comercial y centradas al usuario final a ser una base principal para muchos operadores, operadores que han adoptado este sistema operativo para gestionar su decodificadores.
Muchos son los usuarios que desconocen que los decodificadores que utilizan para acceder a la televisión por cable utilizan una versión de Android TV, un movimiento que le ha permitido a Google convertirse en el principal software de los dispositivos inteligentes conectados a la televisión. Según Govil-Pai, directora senior de gestión de productos de Android TV esta plataforma tiene «decenas de millones de usuarios».
Govil también afirma que esta plataforma es utilizada actualmente por más de 100 operadoras de televisión. Algunas de las grandes que están probando e implementando esta versión de Android son AT&T que está probando Android TV en las cajas DirecTV, y TiVo está trabajando en un sistema de grabación gestionado por Android TV. Govil también afirma que la mitad de los usuarios de Android TV proviene de decodificadores de operadoras.
Para ponernos en perspectiva: Roku es uno de los set-top boxes más populares en Estados Unidos y tiene alrededor de 60 millones de usuarios mensuales. No hay datos oficiales acerca del uso de otros sistemas operativos de TV con licencia, como Fire OS de Amazon, webOS de LG o Tizen de Samsung.
Sony es uno de los pocos fabricantes que a día de hoy, al no disponer de un sistema operativo propio como LG o Samsung, está apostando por Android TV en todos los modelos que está lanzando al mercado, lo que permite ofrecer un plus de compatiblidad que otros fabricantes únicamente ofrecen a través de sus smartphones.
