Los fabricantes apuestan todos los años por esa nueva funcionalidad que los diferencie de los demás y que suponga un antes y un después para la experiencia que obtiene un usuario con su teléfono. Se invierten millones de euros en investigación y desarrollo para poder llevar algo nuevo a ese smartphone que clame la atención de los usuarios y sus resultados financieros a final de año sean bien positivos para seguir lanzando esas funcionalidades estrella que todos deseamos tener.
Nunca sabemos lo que vamos a tener el próximo año o si esa novedad en Android N tendrá su impacto o si ese nuevo Galaxy S será aquel que estábamos deseando, pero hay ciertas características que se han convertido ya en indispensables a día de hoy cuando hace unos años podría verse como algo de locos o que no tenía mucha razón de ser que se convirtiera en algo cotidiano su uso. Hay otras tantas novedades que siguen estando presentes en nuestro día, pero hay tres que han marcado una gran diferencia para sacarle mayor partido a nuestros smartphones.
Pantallas más grandes
El Galaxy Note fue ridiculizado cuando fue anunciado por primera vez cuando la media en las pantallas no pasaba de las 4 pulgadas, pero cinco años después ahora mismo las cinco pulgadas es el estándar para muchos teléfonos.
La razón para que estas pantallas grandes sean algo cotidiano es por la enorme cantidad de contenido multimedia que puede ser lanzado desde nuestros smartphones al mejorar en el hardware y elementos, como la cámara, de forma espectacular.
Otro de los motivos para que las pantallas grandes hayan sido un éxito es por la optimización del espacio frontal del teléfono para que los biseles sean más finos y el panel ocupe un gran ratio. Esto ha permitido que un smartphone de 5,3 pulgadas no ocupe tanto espacio como sí pasaba con esos primeros Galaxy Note.
También hemos de recordar como esos primeros smartphones de pantallas enormes fueron criticados por la misma Apple, para que al final también pasaran por el aro al ser una propia evolución y cambio en el mercado.
Escáner de huella dactilar
Este es el elemento al que uno puede mirar como si le estuvieran vendiendo algo que no vale para nada, pero que en el momento que lo usa por primera vez, ya lo incrusta en su día a día como si estuviera ahí desde que uno hubiera nacido.
Esto supone que sea muy cómodo desbloquear el terminal de forma segura con poner la punta del dedo para pasar de forma directa al escritorio del teléfono. En la ubicación es donde todavía se encuentra un gran debate, ya que hay algunos fabricantes que apuestan por la parte trasera, otros por el lateral y otros tantos en el frontal en el botón home físico como sucede con el Galaxy S7.
Aparte de lo que significa la comodidad de desbloquear el terminal a través del sensor, también ofrece una cualidad en la seguridad para poder acceder a la app de la cuenta bancaria al usar tu huella dactilar sin tener que introducir PIN ni nada por el estilo.
Aunque en ciertos teléfonos no es del todo efectivo, ya que produce errores en la lectura, es recomendable registrar varias posiciones para que no haya tantos problemas.
La doble pulsación para encender el terminal
Puede que me equivoque, pero fue LG con su G2 el que extendió esta característica para convertirla en una de las más innovadoras y efectivas para despertar al terminal de su letargo. Una pulsación rápida sobre la pantalla y tenemos al smartphone ya listo para su uso. Una innovadora característica que se ha expandido a más marcas para que ahora la gran mayoría la tengan como una opción para encender el móvil.
Otras apps, como Nova Launcher, la ha introducido en su lanzador de apps para que se pueda apagar la pantalla al pulsar dos veces sobre el escritorio. Otra forma de usar esta gran característica rompedora que generalizó LG en su día con ese gran G2 que significó la vuelta de este fabricante a la gran calidad en terminales.