The Bonfire 2: Uncharted Shores es un simulador survival en el que hemos de llevar a nuestro pueblo para que progrese y sea capaz de adaptarse al entorno. Un juego que engancha desde el principio, aunque desde la demo gratuita solamente nos permiten jugar diez días para valorar su compra por 4,99€.
Un simulador en el que hemos de gestionar a todos los ciudadanos para que hagan diversas tareas y cumplan su función adecuadamente para así ir progresando. Un título de calidad que viene desde Steam y que visto lo visto en Android, casi se puede decir que es casi único; a no ser el gran Civilization VI, aunque tiene un gameplay bien distinto. Vamos a ello.
Haz que tu pueblo progrese
Sin el progreso no tendríamos nada de lo que nos hace la vida bien cómoda y es aquí donde entra parte del gameplay de The Bonfire 2, un simulador survival en el que hemos de gestionar un pueblo para que este crezca en número y pueda adaptarse a une entorno que no le es apto si no nos andamos con cuidado.
Por ejemplo, si a la hora de dormir no montamos una serie de guardias, las bestias de la noche asediarán nuestro asentamiento para llevarse la vida del cazador o mismamente del que recoge madera. Así hemos de gestionar a nuestros ciudadanos para que estos desempeñen todo tipo de actividades que nos permitan sobrevivir y seguir construyendo nuevas edificaciones.
Estos ciudadanos se valen de herramientas que podemos construir como sucede con el carpintero y esos carros que permiten llevar el doble de carga o esas lanzas que mejorarán las capacidades de ataque de nuestros guardas de la noche. Este es parte del gameplay de un juego de supervivencia que se deja jugar desde el primer día y que consigue que en cuestión de nada estemos decidiendo si pagar esos 4,99€ al acabar los diez días gratuitos.
Sube el nivel de los pobladores de tu asentamiento en The Bonfire 2
Cada uno de los miembros de tu tribu son importantes, así que hemos de cuidar bien de mejorarlos cuando se nos permite aumenta alguna de sus tres estadísticas a tener en cuenta. La fuerza, agilidad e inteligencia son los puntos a los que iremos añadiendo más para así asignar a esos ciudadanos a tareas que mejor les venga.
Por ejemplo, el uso de la lanza está vinculado al ataque a distancia, lo que es la agilidad, mientras la fuerza, lógicamente al combate de melé. Así hemos de usar los mejores miembros de la tribu para que puedan resolver mejor las tareas asignadas.
Al igual que según vayamos construyendo más edificios, podremos acceder a nuevas fuentes de alimento o herramientas valiosas. Y como no, en un juego de supervivencia, todo materia se recoge, como sucede con las bestias de la noche que nos suministrarán el valioso cuero.
Habilidades innatas para tu gente
Uno de los puntos interesantes de The Bonfire 2 es la habilidad que toma nuestra gente cuando se les son asignadas tareas recurrentes. Podrán tener habilidades especiales para correr más o ese punto especial para el combate. Un juego de simulación que nos ha gustado y que te invita a pasar por caja para tener todo el contenido sin pagos extra ni publicidad ni nada al estilo.
Visualmente juega con ese tono carituresco de colores planos que le da su aquel y una ambientación bien recreada para hacernos ver que estamos ante un juego de supervivencia. Técnicamente cumple a la perfección con un contenido que nos llevará a disfrutar durante muchas horas. La banda sonora es la adecuada y tiene detalles importantes como que está en español.
Un buen simulador de supervivencia llamado The Bonfire 2 en el que has de llevar a tu pueblo al progreso. Tienes la demo gratuita con 10 días y luego la compra final por 4,99€ para desbloquearlo. No se puede pedir más por ese precio.
Opinión del editor
Un simulador de supervivencia de un pueblo que engancha desde el primer segundo. Está en español con una gran relación calidad-precio.
Puntuación: 7,1
Lo mejor
- En términos generales es un buen simulador
- Los pobladores tienen su carácter
- Simulación más ataque y supervivencia
- Visualmente se deja gustar
Lo peor
- Puede llegar a ser algo difícil si no estamos atentos
