En medio de la situación actual que estamos viviendo gracias a la cuarentena causada por la expansión del COVID-19 como pandemia en el mundo, es difícil desembolsar la misma cantidad de dinero que antes, ya que la economía global ha decaído por evidentes razones. Por ello es que esta noticia que a continuación detallamos nos deja con un sabor de boca amargo…
Lo cierto es que Qualcomm está preparando su próximo chipset buque insignia para terminales de altas prestaciones. Esto es algo que ya se sabía, así como el nombre del mismo, que es Snapdragon 875. Si bien también es de esperar que presente un costo de venta mayor al del Snapdragon 865 actual, no anticipábamos que este sería de unos 100 dólares más por el que el fabricante de semiconductores ofrece el SDM865 mencionado. Esto es algo que repercutirá bastante -y no de buena forma- en los precios de los futuros móviles flagship que lleven este SoC en su interior.
El Snapdragon 875 se encontrará alojado en móviles con precios más elevados que los de la generación gama alta actual
Así es. Con respecto a la generación gama alta actual, la siguiente será más costosa, pero no necesariamente unos 100 dólares más, que es lo que señala el nuevo rumor que ha surgido hace unas horas gracias a fuentes internas de Qualcomm, sino más, ya que también hay que tener en cuenta que los siguientes teléfonos inteligentes se jactarán de otras características y especificaciones mucho mejores que las que a día de hoy podemos encontrar en el segmento premium.
El Snapdragon 865 es vendido por Qualcomm por unos 150-160 dólares actualmente. El coste final del Snapdragon 875 sería de unos 250 dólares, cifra que, sin pena alguna, trasciende lo pautado hasta ahora por chipsets de alto rango de años anteriores.
Si bien este nuevo y aún misterioso chipset contará con mejoras técnicas bastante considerable que posiblemente lo vuelvan el mejor procesador para teléfonos inteligentes del 2021, creemos que su elevado precio especulado se aleja bastante de lo antes planteado por otros SoC de alto performance de la firma.
De acuerdo con la información recopilada en estos últimos meses, este chip seguirá contando con una configuración de ocho núcleos que estará conformada de la siguiente forma: un núcleo Cortex-X1 de alto rendimiento para la ejecución de juegos y apps de mucha exigencia, otro bloque con tres núcleos Cortex-A78 para el procesamiento promedio, y otro de alta eficiencia con cuatro núcleos Cortex-A55 que se encargará de las tareas más simples, así como de ofrecer el mayor ahorro energético posible. A su vez, todos estos núcleos tendrán la capa de personalización Kryo de Qualcomm, algo a lo que la compañía ha acostumbrado en ocasiones pasadas.
Claro que también llegaría una nueva GPU con este System-on-Chip. No hay detalles concretos sobre esta, pero, a juzgar por la secuencia de la nomenclatura que Qualcomm ha hecho anteriormente, se llamaría Adreno 660. Esta presentaría un rendimiento para juegos mucho mejor, algo que ya, de por sí, es emocionante, pues el que ya obtenemos hoy en día con el SDM865 es realmente bueno. A esto hay que aunarle el tamaño de nodo de 5 nm que tendría el SoC.
Por supuesto, el soporte para conectividad 5G se mantendría en el Snapdragon 875, aunque posiblemente con un módem que le haga sucesión al X55 del Snapdragon 865. Esto es algo que se volverá estándar dentro de poco, ya que cada día la infraestructura 5G está creciendo en el mundo, con proyección a estar presente en decenas de países en poco tiempo.
Uno de los móviles de alto rango más económicos con Snapdragon 865 es el Black Shark 3 de Xiaomi. Este se consigue actualmente por poco menos de 600 euros… Tenemos que suponer, en base a esta información, que este rango de precio mínimo ascendería a unos 700-750 euros con el Snapdragon 875. Esto sería más desolador si hablamos de futuros móviles más caros, como lo serían los sucesores de la serie Galaxy S20 de Samsung, la cual en este momento sobrepasa fácilmente los 1.100 euros gracias a la versión Ultra de la misma, que es la más costosa del trío.