Del Galaxy S7 y Galaxy S7 edge se ha dicho que son meras actualizaciones del S6, pero para decir una gran verdad, se ha recuperado el soporte a la tarjeta micro SD y la resistencia al agua. Dos características bien criticadas en el Galaxy S6 que ahora se han subsanado al igual que parece la vida de la batería.
Desde un analista en Corea del Sur, se conoce que Samsung ha distribuido más de 9,5 millones de Galaxy S7 en el primer trimestre del año. Esta cifra supera a las estimaciones previas que indicaban los 7 millones de teléfonos distribuidos por todo el planeta, lo que, de primeras, posiciona al fabricante coreano ante un año que podría cambiar algo ante esos dos anteriores de declive en las ventas de sus gama alta.
La realidad a la que se atiene Samsung muestra perfectamente el momento en el que se encuentra el mercado donde la gama alta se está viendo desplazada por una buena serie de factores entre los que encontramos la llegada de ese batallón de teléfonos de gama baja-media que lo están haciendo muy bien, compañías como Huawei que pujan muy fuerte y lo que sería un mercado sobresaturado.
Una de las razones para que Samsung tenga unas mejores estimaciones previas de mejores ventas de su buque insignia, se debe al adelantar el lanzamiento de este teléfono en un mes a lo que fue el Galaxy S6. De esta forma también se ha adelantado a Apple en este mes en el que es una gran opción de compra para aquel usuario que no quiera esperar más y quiera un producto de gama alta.
Un Galaxy S7 que ha recuperado finalmente la tarjeta micro SD y la resistencia al agua, dos factores que para muchos usuarios son vitales, sobre todo la opción de aumentar la memoria interna del teléfono debido a las altas prestaciones del mismo.
