Aunque era un secreto a voce finalmente Nokia presentó su nueva gama Nokia X en el Mobile World Congress 2014, el primer smartphone de la compañía finlandesa que funciona con Android. Sí, finalmente los chicos de Nokia han querido probar suerte con el sistema operativo de Google.
Una gama de teléfonos de gama media que destacan por su precio más que ajustado. Si tenemos en cuenta que el Nokia X cuesta 89 euros, podemos ver que el equipo de Nokia pretende reventar el mercado ofreciendo un gran terminal a un precio realmente atractivo.
Diseño
Cuando probé el Nokia X lo primero que me llamó la atención era su diseño, muy semejante al de la aclamada gama Lumia. Con una estructura cuadrada el Nokia X tiene un tacto bastante agradable. Además su peso, 127 gramos, y sus reducidas medidas, 115,5 mm de alto 63 mm de largo y 10,4 mm de ancho hacen de este dispositivo un teléfono cómodo y manejable.
Disponible en una gama de colores muy vivos: blanco, negro, verde, amarillo y rojo, Nokia X se convierte en un teléfono jovial y muy atractivo a la vista. Los botones de encendido y volumen están colocados en el lateral derecho del teléfono, haciendo que su uso sea muy cómodo.
Características técnicas del Nokia X
Viendo el precio no nos esperamos un terminal de gama alta, aunque el Nokia X va a dar mucha guerra gracias a su panel IPS LCD de cuatro pulgadas que nos permite un ángulo de visión casi completo. Eso sí, la resolución no alcanza los 720, con 223 píxeles por pulgada, aunque por su precio me parece más que suficiente.
Nos encontramos con una pantalla muy luminosa, marca de la casa, y aunque estemos usando el teléfono en un entorno con mucha luz natural puedes utilizar el dispositivo sin problemas. Tras abrir el capó nos encontramos con un procesador Qualcomm Snapdragon S4 de doble núcleo a 1GHz, una GPU Adreno 203 junto con 512 MB de RAM. La memoria interna es de 4 GB aunque se puede ampliar a través de tarjetas microSD.
En mi opinión la RAM se queda un poco corta, pero si tenemos en cuenta que este teléfono está orientado a usuarios que quieran un terminal sólido, económico y para utilizar servicios de mensajería instantánea, GPS, llamadas y poco más, el terminal aguanta sin problemas.
Su cámara de 3 megapíxeles sin flash es el punto más débil del Nokia X. Aunque la calidad de las capturas en un entorno iluminado son más que aceptables, olvídate de hacer fotografías en zonas poco iluminadas. No le pidamos peras al olmo…
Destaca la autonomía del Nokia X. Aunque tiene una batería de 1.500mAh, el terminal aguanta el trote diario sin problemas. Se nota que los finlandeses han trabajado y mucho en este aspecto para optimizar al máximo el rendimiento de la batería para que el terminal no nos deje tirados en el peor momento.
No nos podemos olvidar de otro detalle muy interesante: el Nokia X dispone de soporte Dual SIM, por lo que podremos utilizar dos tarjetas SIM diferentes.
Software
Aquí llegamos a uno de los puntos calientes del Nokia X. Aunque funciona con Android, el equipo finlandés incorpora una capa que simula la interfaz de Windows Phone, ofreciendo los servicios de Microsoft.
Cualquier usuario de Android se le hará raro utilizar esta interfaz, aunque tenga trazas del sistema operativo de
Google, como la estructura del menú de ajustes, o el botón de compartir. Pero no se ve como un Android. Por ejemplo la barra de notificaciones es un desplegable a la derecha de la pantalla principal del teléfono.
Destacan servicios como Skype, donde te regalan un mes para realizar llamadas internacionales, o Microsoft OneDrive, la nube de los de Redmond que ofrece 10GB gratis a sus clientes.
Una de las aplicaciones más atractivas es Nokia Here, la app de mapas que funciona como un navegador GPS de forma impecable. Lástima que con una pantalla tan reducida no se pueda aprovechar al 100%.
En contra tenemos la tienda de aplicaciones. Nokia X no tiene una Play Store sino una tienda propia de Nokia, con un catálogo cada vez más grande aunque tiene un fallo garrafal: WhatsApp aún no está disponible. Si bien es cierto que te puedes descargar la apk e instalarla de forma manual, si tenemos en cuenta el mercado al que está orientado no es buena idea complicar las cosas a los usuarios.
De todas formas el Nokia X ya se puede rootear por lo que si buceáis un poquito por nuestra web encontraréis un manual espléndido donde podréis convertir este teléfono en un Android puro. En definitiva un terminal de gama media con dos puntos muy importantes: por un lado tenemos un Nokia y su más que conocida calidad y por otro tenemos un terminal a un precio realmente asequible. Por 89 euros, me parece que el Nokia X es un verdadero chollo.
Opinión del editor
Pros
- Dispositivo pequeño y manejable
- Interfaz personalizada realmente atractiva
- Ideal para entrar en el universo Android
Contras
- Prestaciones muy limitadas
- Cámara sin flash