El ocaso de la división de móviles Sony, cada vez más cerca. ¿Por qué?

El fabricante no está pasando por su mejor momento. No, la firma con sede en Tokio sigue siendo una de las más importantes del sector tecnológico, donde vende televisores y su división Sony Music arrasa a nivel mundial. Pero la división de móviles Sony no va precisamente bien. Ya en su momento os hablamos de los cambios realizados por la compañía para levantar el vuelo, como cuando decidieron unificar varias divisiones para maquillar un poco las paupérrimas ventas de smartphones. Pero no está siendo suficiente.

Y es que, tras enterarnos de que Sony va a dejar de vender teléfonos en América del Sur, debido a las malísimas ventas conseguidas en este país, hoy nos acabamos de enterar de las ventas de móviles Sony en 2018, y no, las cosas no le van nada bien a la compañía japonesa.

Sony ha vendido tan solo 6.5 millones de teléfonos en el último año

Inicialmente, la firma japonesa tenía planeado vender 10 millones de teléfonos inteligentes entre marzo de 2018 y marzo de 2019. Pero, a medida que pasaban los meses y las ventas de sus soluciones no hacían más que bajar, el fabricante comenzó a bajar sus expectativas. Primero, revisó la cifra de ventas de teléfonos móviles Sony a 9 millones, luego la bajó a 7 millones. Y, finalmente, el pasado mes de enero volvió a reducir la previsión de ventas a 6.5 millones de unidades. Y sí, este es el número de smartphones que ha vendido la compañía en un año.

Si tenemos en cuenta que Sony llegó a vender 40 millones de teléfonos inteligentes en el periodo fiscal correspondiente a 2014, está claro que las cosas van sumamente mal. Y claro, estos malos resultados han provocado unas pérdidas de 97.000 millones de yenes, unos 840 millones de euros al cambio para la división de móviles Sony, lo que se ha traducido en despidos y recortes que alcanzan el 50 por ciento.

Y ojo, que las previsiones de la compañía japonesa no podían ser más agoreras: pronostican que venderán cerca de 5 millones de teléfonos móviles Sony hasta marzo de 2020. ¿Qué significa? Que para marzo de 2021, el fabricante dejaría de fabricar smartphones ya que no le sale rentable. Y puede que incluso antes. Pero, ¿cómo ha llegado a este punto el fabricante con sede en Tokio?

Omnibalance, un diseño obsoleto en el que sigue apostando la firma japonesa

En su momento, los teléfonos móviles Sony eran todo un referente en el sector. La firma japonesa destacaba por ofrecer una soluciones realmente completas, siendo de las primeras marcas en ofrecer un teléfono de gama alta con resistencia al agua, el aclamado Sony Xperia Z. El problema es que, han pasado 6 años, y la firma sigue apostando por un diseño muy semejante al de este modelo lanzado en 2019. Si, la firma japonesa sigue ofreciendo dispositivos con un diseño donde los marcos frontales hacen que la estética del terminal parezca excesivamente antigua. Y claro, sus competidores le han comido la tostada.

Los precios de los móviles Sony son excesivamente altos

Los teléfonos de la firma japonesa son realmente buenos, pero caros. Muy caros. hasta hace poco más de un año, un teléfono de gama media de Sony rondaba los 400 euros, cuando podíamos encontrar soluciones mejores a mitad de precio, y no hablemos de la gama entrada, donde las cifras eran tan abultadas que todavía no entendemos cómo podían vender terminales. Y en la gama alta se encontraban con un gran problema: si bien es cierto que la certificación IP que dotaba a sus soluciones más premium de resistencia al polvo y al agua marcaban la diferencia respecto a sus competidores, éstos no tardaron en adoptar esta característica en sus soluciones, por lo que ese valor añadido que tenían los móviles Sony se diluyó.

Y, seamos claros: nadie quiere un teléfono cuadrado, con un diseño obsoleto, si puede tener un terminal con un diseño más moderno, o incluso dispositivos con las mismas, o mejores prestaciones, a un precio menor.

El apartado fotográfico, el gran talón de Aquiles de los teléfonos móviles de Sony

Por último, tenemos un punto en particular que ningún usuario entiende. ¿Cómo puede ser que el fabricante japonés sea el mayor distribuidor de componentes para la cámara y no tenga el smarphone con mejor cámara del mercado? Sí, la gran mayoría de buques insignia apuestan por sensores de la firma japonesa, pero las cámaras de los móviles Sony no son precisamente las mejores. Para ser exactos, no están ni en el top 5. Y no nos olvidemos de la costumbre del fabricante por sacar un nuevo buque insignia cada 6 meses, saturando el mercado de modelos que son sencillamente calcos con ligeras mejoras que hacen que el usuario decida apostar por otras marcas.