Por fin ha llegado el día que muchos estaban esperando. Hoy es 29 de marzo y Samsung dará a conocer de manera oficial sus nuevos buques insignia, los terminales Galaxy S8 y S8+ sin embargo, un último rumor señala que debido a la «lenta» producción de procesadores, el suministro de los nuevos terminales podría verse afectado.
Según informa desde Corea del Sur el diario The Korea Herald la oferta de los nuevos Samsung Galaxy S8 y S8 Plus podría no satisfacer la demanda como resultado de la «lenta producción de los chipsets Qualcomm». La razón tras esta situación no ha sido revelada sin embargo, las fuentes del diario surcoreano también han indicado que también la propia producción del chip Exynos 8895 de Samsung está «cayendo detrás de las expectativas del mercado».
El pasado mes de enero ya se divulgaron rumores de que Samsung estaba «acumulando» unidades del procesador Snapdragon 835 de Qualcomm, lo que estaría impidiendo que otros fabricantes pudiesen integrarlo en sus teléfonos. Así, el LG G6 y HTC U Ultra fueron lanzados posteriormente con un procesador Snapdragon 821. Mientras tanto, Forbes también informó que el Snapdragon 835 no estaría disponible «en grandes cantidades hasta después del Galaxy S8 [lanzamiento]».
Desde entonces también se ha especulado con que Samsung estaría teniendo un mayor número de pre-pedidos para el Galaxy S8 y el S8 Plus de los que recibió para el Galaxy Note 7; del mismo modo, la compañía espera también mayores ventas iniciales que de las que logró con los Galaxy S7 y S7 Edge.
Considerando todo lo anterior, efectivamente parece bastante probable que no existan suficientes unidades de chips para satisfacer la demanda inicial de los dispositivos. Así, Samsung habría logrado garantizar que sus nuevos buques insignia sean los primeros en integrar el Snapdragon 835, aún a costa de «cerrar el grifo» a terceros fabricantes.
Esto no significa que vaya a existir un retraso en el debut de los Galaxy S8 y S8+, pero sí que podrían ser unidades escasas en su lanzamiento, algo que deberá tener en cuenta todo aquel que desee hacerse con uno de los nuevos terminales surcoreanos.