Hoy hemos sabido que OnePlus no ha querido aprovecharse de los 6 GB de RAM que posee el OnePlus 3 debido a que si fuera así haría un consumo excesivo de la batería. Para ofrecer una mejor experiencia al usuario ha decidido «caparlo» desde el software, aunque ha publicado los archivos para que los usuarios puedan crear ROMs personalizadas para que hagan uso de toda la memoria RAM.
Ahora tenemos otra explicación desde otro fabricante para que entendamos por qué un teléfono Xiaomi no es resistente al agua. Es el propio fundador de la compañía, Lin Hun, el que da una razón lo suficientemente entendible para que no critiquemos de forma banal la no integración de esta certificación, y se debe principalmente a que es un proceso bastante costoso y poco eficiente.
El coste de añadir la resistencia al agua elevaría el precio final a un 20 o 30% más por esta característica. Esto se llevaría por delante ese santo y seña de Xiaomi de ofrecer terminales a un precio bien ajustado y que le ha permitido destacar ante otros fabricantes.
Otra de las razones para lo que Jun dice que es poco eficiente, ya que cualquier golpe recibido podría conseguir que se perdiera la impermeabilidad. Por lo que esa eficacia que se espera en un terminal con este tipo de certificación, que hemos visto en el Galaxy S7 o los Xperia Z, no lo es tanta y de esta forma también evita que pueda darse de que la experiencia de uso empeore para sus futuros clientes.
Así que podemos olvidarnos de tener algún día un smartphone de Xiaomi con esa certificación que si vemos en otros teléfonos como los mencionados. Ya vimos en su momento como ciertos terminales de Sony recibieron muchas críticas por una supuesta impermeabilidad que finalmente no era así, aparte de lo que significa reparar todos esos terminales y que conlleva unos gastos excesivos para poder devolver el teléfono del cliente a su estado normal.
