El asistente de Google lleva con las rutinas aproximadamente más dos años, con el tiempo han ido mejorando y funcionando en cualquier dispositivo. Los beneficiados de esta función son los altavoces Google Home y Google Nest, una gama que mantiene un buen ritmo alto de ventas desde su lanzamiento.
La aplicación Google Home recibió varias mejoras en el mes de Noviembre, mejorando dos cosas, los controles de la reproducción y las rutinas. Este último punto podía ser lanzado, por ejemplo en un altavoz Google Nest Hub y no nuestro dispositivo, una de las cosas que han usado bastante los usuarios.
Cómo colocar rutinas de Google Home en el escritorio de tu teléfono
Una de las últimas novedades de la aplicación Google Home nos permite anclar las rutinas al home de nuestro teléfono para iniciar esto mucho más rápido. Esto además de ofrecer rapidez hará que no tengamos ni que acceder a ella, bastante con un simple clic en ella para empezar a funcionar.
Crear un acceso en el escritorio es explicado por la parte de Google, pero lo mejor es hacerlo sin tener que ver el tutorial una vez la abres:
- Accede a la aplicación Google Home
- Busca ahora el apartado de Rutinas en la página principal de Home
- Busca la rutina que realices más a diario para anclararla en el escritorio de tu dispositivo
- En la parte superior vas a ver una flecha apuntado a una pantalla, pulsa y confirma con el añadir automáticamente
- También podrás hacerlo arrastrando el mismo al escritorio, aunque la primera opción es la más rápida y sin necesidad de llevarla con una pulsación
Ahora una vez realizado este paso te mostrará la notificación en la pantalla, por lo que vas a tener esa Rutina de Google Home siempre visible y accesible. Google Home nos dejará anclar más de una cosa, por lo que si quieres puedes pasar otra rápidamente al escritorio.
Las Rutinas son importantes, sobre todo si quieres ser avisado por el altavoz, entre las cosas importantes están el de que llegue a darte los buenos días, esto pasa añadiendo acciones concretas. Las rutinas funcionan cuando estás en casa y fuera, no es necesario que estés tampoco presente.
