El nuevo sensor de imagen CMOS para smartphones de Sony tiene su propia DRAM

El poder de lo diminuto en la tecnología nos ha permitido acercarnos a todos esos dispositivos que llevamos en la mano, en el coche o tenemos mismamente en el hogar, sin hablar de la industria y más servicios que se sirven de lo pequeño en un espacio bien reducido. La ingeniería y la manufactura han llegado a un nivel tan alto que no se sabe realmente cual es su techo.

Sony es una de las que se lleva el gato al agua en la fotografía y ahora es cuando ha subido de nivel con un sensor de 3 capas BSI CMOS para smartphones que, gracias a la tecnología moderna, lleva en sus entrañas a su propia DRAM.

DRAM en un sensor de imagen

La RAM es un tipo de almacenamiento de datos volátil de alta velocidad, que es de vez en cuando asociada con procesadores y ordenadores. Pero Sony está ahora explotando los beneficios de esa tecnología para mejorar la velocidad de los sensores de imagen. Y no solamente eso, sino que ha sido capaz de reducirla a un tamaño de un sensor que puede ser incluido en un smartphone.

La pregunta que surge es para que se quiere implementar la DRAM o Dynamic RAM dentro de un sensor de imagen. El propósito de la RAM es incrementar la lectura de datos del sensor de imagen, al considerarse este tipo de memoria como una de las más rápidas en almacenamiento de datos y tecnologías de acceso que es asequible por la mayor parte de bolsillos. Con este contexto, la DRAM se encuentra ubicada en un «sandwich» entre la estructura de píxeles BSI y la capa de circuito ubicada debajo que gestiona el procesado de señal.

La DRAM así actúa como un tipo de área que puede leer datos rápidamente que se dirigen al sensor para que puedan ser pasados a un procesador más lento. Esto significa que el sensor puede capturar la misma cantidad de información de píxeles en una fracción de un segundo. Especialmente para este sensor, significa que 19,3 millones de píxeles pueden ser registrados en tan solamente 1/129 fracción de segundo, comparado a las cantidades similares que requiere 1/30 fracción de segundo, es un gran aumento.

Otra de las ventajas de incluir la DRAM en el sensor de imagen es que puede capturar slow motion a 1.000 fps incluso a resoluciones 1920 x 1080 (Full HD). El sensor en si mismo es capaz de 21.2 megapíxeles y capaz de grabar vídeo a 4K a 60 FPS o 240 FPS para Full HD. La capacidad del sensor de DRAM es de 1 Gigabit, lo que es prácticamente 125 MB.

Sony no ha revelado cuando este sensor será incluido en un smartphone, pero no sería muy loco pensar que podría estar en un gama alta Xperia para finales de este año.

Sony como uno de los puntales

La compañía nipona vuelve a demostrar con esta tecnología que se encuentra perfectamente ubicada para ganarse la confianza de muchos fabricantes para tener la mejor fotografía. Solamente le falta que sea capaz de integrar el software necesario en su gama Xperia para que utilice de mejor forma sus sensores, ya que son otras marcas la que a base de algoritmos sabe aprovecharse del gran hardware presentado por Sony.

Es uno de los mayores hándicaps con los que ha contado Sony y su gama Xperia, aunque últimamente, incluso en actualizaciones a los gama alta lanzados en 2015, ha mejorado considerablemente la calidad de la fotografía. De todas maneras, se espera más del fabricante nipón en este sentido cuando tiene el mejor hardware e inclusive el Google Pixel, que cuenta con uno de sus sensores, posee ahora mismo la mejor cámara actual habida en un smartphone.

Solamente nos quedará ver a finales de año de qué es capaz ese sensor de imagen que contará con DRAM, así que con muchas ganas de ver las capacidades del mismo en ese Xperia buque insignia.