Con el chip Snapdragon 835 hay un tema que estará poniendo de los nervios a varios fabricantes. Sabemos que Qualcomm se asoció con Samsung para manufacturar este chip por su arquitectura, pero lo sorprendente es que «de repente» ese chip se ha retrasado en la fase de fabricación a escala, lo que significa que las marcas que tenían pensando presentar sus dispositivos en febrero o marzo, tendrían que esperarse, tal como le tocará a Samsung.
No sabemos si ha sido un movimiento propiciado aposta por algunas de las participantes de esa trama de manufacturación, pero algunos como LG han tenido que mover ficha y anticiparse a ese problema de fabricación a escala del Snapdragon 835 para pasar completamente de él y centrarse en el Snapdragon 821. Veremos donde acaba todo esto, ya que de momento Samsung parece tener la exclusividad del nuevo chip de gama alta de Qualcomm.
Esto no es nada nuevo. El Snapdragon 820 del año pasado fue exclusivo de Samsung hasta el momento que el Galaxy S7 llegó al mercado. Por otro lado, la exclusividad puede tener su razón de ser, ya que Samsung es el que hace los chips para Qualcomm, pero no parece un juego muy limpio el que todas las marcas tengan que esperar a ese lanzamiento para disponer de sus nuevos terminales.
Esto ha llevado a las dos compañías a estar bajo el escrutinio por prácticas empresariales injustas, así que sería cuestión de tiempo que se empezara con litigios.
Por ahora, LG no tiene más elección que quedarse con el Snapdragon 821, un SoC que tampoco se distancia mucho del 835 en términos de potencia en el cálculo, aunque será en la eficiencia donde más se note seguramente. La integración de Google Assistant seguramente que será una de las opciones mejores en términos de software, al ser el primer smartphone no Pixel que lo tienen.
Un smartphone del que hemos visto supuestamente su primera imagen hace un rato y que tendrá pantalla de 5,6 o 5,7″ con resolución 2880×1440 con aspecto de ratio 2:1.